OBSERVACIONES RESPECTO AL PENSAMIENTO CRÍTICIO (CONTINUACIÓN)

CHILE



Por Manuel Acuña Desde Estocolmo

Decíamos que es urgente legislar sobre una Ley de Medios de Comunicación. El pensamiento crítico lo exige, porque, sin él, somos masas influyentes. Y la mentira reiterada para cubrir malas acciones, es una patología. Y ocurre que la vida social necesita confiar (“En boca de mentiroso, lo cierto se hace dudoso”, dice un refrán). La confianza es la semilla de la felicidad. Por desdicha, se ha perdido la capacidad de asombro: se vive normalizando la mentira, el engaño, la falta de probidad.

El pensamiento crítico es la herramienta fundamental para combatir los males que atacan a nuestra sociedad. Uno de ellos es el sentimiento de injusticia que corre por doquier. Y no podemos estar más de acuerdo con la maestra Clara Méndez Martínez, bloguera en RR.SS. La citamos: “Somos un país herido por la injusticia; … este Chile que se duerme en el individualismo, exitismo y basura mediática que aumentan nuestros prejuicios, xenofobia y arribismo”. Sin duda, el pensamiento crítico nos ayuda a salir del túrbido horizonte que empaña la vida social, nos otorga emancipación intelectual. Recordemos que el arte en general es (o debe ser) una expresión contundente de pensamiento crítico.
 
Nuestro Manuel me compartió una observación hecha por Bill Gates, fundador de Microsoft, respecto del tema de marras. El exitoso empresario advierte que los celulares pueden tener serias consecuencias sobre las nuevas generaciones, considerándolos como uno de los protagonistas en su crianza. Destaca un aspecto crítico del uso del teléfono celular en niños: la amenaza que representan para la creatividad y el pensamiento crítico. Según él, las horas de aburrimiento son un recurso invaluable para ejercitar la concentración y generar nuevas ideas, o sea, hacer un uso saludable del celular. Por ello, Gates expresa su preocupación porque este tiempo de ocio haya quedado relegado en las nuevas generaciones debido al estímulo constante de las pantallas. El magnate confiesa que el tiempo de ocio y sin distracciones fue “crucial” para su éxito. Se aislaba completamente en una cabaña con sus documentos para reflexionar, libre de interrupciones. Se pregunta si  su rendimiento habría sido el mismo teniendo al frente el “tiempo de pantalla”. Su infancia fue basada en el juego. “Ahora, la infancia basada en el teléfono es más común”, aseguró.
Gates aconseja posponer el acceso a teléfonos inteligentes hasta que los niños lleguen a su mayoría de edad, para que hagan uso de redes sociales de manera responsable.”No todo fue diversión y juegos, pero tuve lo que Haidt llama una infancia basada en el juego”. “Sin la capacidad de concentrarse intensamente y seguir una idea a donde sea que lo lleve, el mundo podría perderse los avances que provienen de poner su mente en algo y mantenerla allí”, aseguró Gates. Opinamos que el uso abusivo de la pantalla automatiza y vuelve perezosa a la mente, obstruyendo todo pensamiento crítico.